Acerca de este curso

Según la sistémica el individuo forma parte de varios sistemas y está compuesto por sistemas. El individuo existe en relación a los demás en sentido vertical y en sentido horizontal.  En un sistema familiar todos los individuos están en interdependencia, todo lo que afecta a uno, afecta a los demás. En el momento de la concepción recibimos todo el legado genético y nos vinculamos de manera específica con varios ancestros de quienes recibiremos la fisiología, lo emocional, lo mental, las fidelidades sistémicas y el grado de conciencia. 

Las intrincaciones

Hay muchos grados de vinculación con los ancestros. Podemos encontrar cuestiones sin acabar, sin asumir: llevar la culpa, la pena o el fracaso de alguien. Podemos estar “intrincados” en un hecho doloroso, complejo, difícil que se refleja en la vida en relaciones o situaciones en las que se sufre mucho de una manera incomprensible. Podemos también estar identificados con algún ancestro de tal manera que no estamos viviendo nuestra propia vida y  toda nuestra energía está bloqueada al servicio de un excluido, una víctima  o un perpetrador que no terminó su ciclo. 

Los muertos necesitan que los vivos vivan, es por eso que en las constelaciones surgen estas fidelidades inconscientes para que el descendiente toma conciencia de su fidelidad ciega al pasado (compensación arcaica) y la transforme en amor a todo como fue y que elija disfrutar de su vida al precio que les costó a sus ancestros (compensación adulta).

¿Qué vamos a trabajar en este tema?

– El destino individual y el destino colectivo.

– Las dinámicas sistémicas, la repetición y la compensación: a qué ancestros he prometido “ yo como tú…” o “Yo por ti”.

– Los campos morfogenéticos y los campos mórficos.

– Qué campos de mi vida están en la compensación arcaica.

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